Una charla informativa sobre el Síndrome de Piernas Inquietas (SPI), también conocido como la enfermedad de Willis-Ekbom, será impartida en Torrevieja, según presentó la edil de ONG y Voluntariado, Carmen Morate, acompañada de la vicepresidenta de la Asociación Española de Síndrome de Piernas Inquietas (AESPI), Ana Jiménez, y del gerente del Centro Médico Parque de las Naciones, Juan Sevilla.
AESPI es una entidad nacional poco conocida por la sociedad que a partir de ahora tendrá actividad en nuestro municipio. “Es importante dar visibilidad a esta asociación, puesto que se trata de una enfermedad de difícil diagnóstico. De este modo, queremos ofrecer una plataforma para muchos pacientes que se encuentran en desconocimiento de esta dolencia”, dijo Morate.
La edil anunció que la charla informativa se llevará a cabo el próximo 22 de febrero en el Centro Cultural Virgen del Carmen a las 18 horas, con la participación del doctor Esteban Eduardo de Vicente, especialista en Neurofisiología Clínica en el Hospital Quirón de Torrevieja y gerente de Alevia, clínica colaboradora con avances especializados en SPI en Elche. Morate animó a todos los médicos de familia, así como al personal relacionado con la salud pública a asistir a la charla para conocer mejor este padecimiento.
A su vez, Ana Jiménez indicó que la asociación se fundó hace más de diez años y actualmente cuenta aproximadamente con 780 asociados, aunque muchos de los pacientes siguen sin estar diagnosticados. “El principal motivo de la charla es dar a conocer nuestra entidad. Nos gustaría conseguir más avances médicos, ya que creemos que hay más de un 5% de personas que sufren este síndrome en España”, declaró.
Por otro lado, Juan Sevilla calificó el SPI como “una enfermedad rara que no tiene fácil diagnóstico, pero que una vez detectada puede mejorar la calidad de vida del paciente”. De hecho, la clínica del especialista se encuentra colaborando con la asociación para atender de manera altruista a las personas que padecen la aflicción.
Sevilla añadió que el SPI se caracteriza por la nula metabolización de la dopamina, “una enzima que se produce de manera natural en el cerebro y que estimula determinadas funciones orgánicas como el control de movimientos voluntarios”. Entre los síntomas más comunes, los pacientes experimentan sacudidas, picores o dolores en las extremidades, sobre todo cuando se encuentran en reposo. Normalmente, estas molestias empeoran por la noche, durante las horas de sueño.