‘Descubre la laguna rosa… sobre dos ruedas’

La segunda ruta cicloturista, bajo el título ‘Descubre la laguna rosa… sobre dos ruedas’, cerró el pasado sábado 11 de mayo las terceras jornadas ‘Lagunas de Torrevieja y La Mata: paisaje cultural, historia y patrimonio’, organizadas por la asociación cultural Ars Creatio, el Ayuntamiento de Torrevieja y la sede de la UA.
Veinte personas procedentes de Torrevieja, Cartagena y Elche participaron en esta ruta, con una distancia de 17 km, que partió desde el monumento al salinero en el Barrio del Acequión y recorrió parte de la vía verde del municipio, con tres paradas junto a la laguna de Torrevieja. Los participantes pudieron conocer el sistema de explotación salinera de la mano de Ana Meléndez, secretaria de Ars Creatio y coordinadora de las jornadas. “Torrevieja tiene un sistema de extracción de la sal que es muy especial y excepcional”, aseguró. Como punto de partida, Meléndez explicó la historia que hay detrás del monumento al salinero y del canal del Acequión, que data de la época medieval del siglo XV.
La ruta continuó en marcha con la bicicleta y se realizaron tres paradas, donde los participantes caminaron a pie hasta la misma laguna de Torrevieja. En una de las paradas, Meléndez dio a conocer el funcionamiento de las salinas tradicionales para explicar por qué la de Torrevieja es tan especial. También relató cómo ha ido evolucionando el sistema de extracción de sal en el tiempo y las diversas obras acometidas, como los canales y el circuito del agua. Además, explicó que la laguna de Torrevieja adquiere ese característico color rosado debido a la artemia salina, una especie de crustáceo que vive en el agua salobre. En otra de las paradas, Meléndez habló de la relación medioambiental entre la actividad salinera industrial y el Parque Natural. “Tenemos especies únicas en el mundo animal y vegetal. No es un parque exuberante, pero lo que hay aquí supera grandes dificultades”, aseguró. “Aquí hay poca agua, mucha arena en el suelo y salinidad, y, sin embargo, surge una serie de especies que se adaptan a esas circunstancias tan adversas”, añadió. La ruta finalizó con una parada en la salida del salmueroducto, “la última gran revolución del funcionamiento de las salinas”, según indicó. “La idea de la ruta es que todo el mundo comprenda el valor histórico, paisajístico y ambiental de las lagunas”, concluyó.

La Torrevieja de los molinos
Francisco Sala Aniorte, cronista oficial de Torrevieja, ofreció el pasado viernes 10 de mayo la conferencia “Molinos salineros en Torrevieja” en el Ayuntamiento de La Mata. Previamente, la presidenta de Ars Creatio, Josefina Nieto, le entregó un obsequio a Joaquín Carrión por la cesión de la fotografía que ilustra el cartel de las jornadas.
Sala explicó que el origen de los molinos de Torrevieja se remonta a comienzos del siglo XVII. El Ayuntamiento de Orihuela, al fracasar el intento de convertir la laguna en piscifactoría, la donó al Estado, que decidió explotarla con la extracción y el embarque de sal. En 1772 se ordenó erigir una ermita en Torre Vieja. El primer administrador de las salinas, Antonio Parra, decidió asimismo la construcción de las Eras de la Sal. Su yerno, Antonio Hidalgo Calvo, tras el terremoto acaecido en 1802, decidió trasladar las oficinas de la Administración de las salinas de La Mata a Torrevieja.
El conferenciante mostró diversos documentos, como planos y fotografías antiguas de Torrevieja -una de 1919 con el poblado de La Mata y Lo Albentosa, y otras de Darblade de 1888 y 1896, ésta con álamos en el paseo Vista Alegre y el Casino recién inaugurado- y las salinas de San Pedro. También ofreció datos sobre los primeros molineros registrados en la ciudad.
Asimismo, se refirió a los dos molinos a vapor que existieron en Torrevieja. Uno de ellos fue protagonista de un trágico suceso el 12 de diciembre de 1890, día en que una explosión causó varias víctimas mortales, entre las que se encontraban mujeres y niños pequeños, según explicó. Por último, mostró fotografías de los últimos molinos que desaparecieron de la localidad y por los edificios de las salinas dedicados a la molienda. Como dato curioso, citó el molino que recientemente se ha construido en la plaza del mismo nombre.