Antoni Jakubowski -Crítico musical
Para los aficionados de la música clásica, la misa de “Réquiem” de W.A. Mozart (1756 – 1791) en su versión original es bien conocida y muy apreciada. Por cierto, hace exactamente cinco años, la obra fue interpretada con sumo éxito por solistas, el coro y la Orquesta Sinfónica de Torrevieja bajo la batuta de J.F. Sánchez. Durante el concierto de mediodía del pasado Jueves Santo en el Teatro Municipal, pudimos conocer una sorprendente transcripción de “Réquiem”, hecha por el Dr P. Lichtenthal (1780 -1853) para un cuarteto de cuerda. El autor del arreglo realizó una reducción de la obra mozartiana, obteniendo realmente un gran resultado.
El Cuarteto de cuerda de la Sinfónica torrevejense interpretó esta partitura, descubierta hace apenas 14 años, creando en el Teatro Municipal un ambiente de reflexión, el que con facilidad se puede manifestar durante la Semana Santa. La formación de los protagonistas; Stanislav Tkach – 1 violine, Petro Vasilevsky – 2 violine, Leticia Cámara – viola y Zurab Kalatozishvili – cello, demostró la versión del famoso “Requiem” de manera íntima pero conmovedora, provocando en varios momentos “piel de gallina” de los oyentes. Mozart había construido unas tensiones, las cuales el cuarteto entregó con bastante éxito. Especialmente en las partes como; “Tuba mirum”, “Recordare”, “Lacrimosa” o “Domine Jesu”, los músicos causaron gran impresión, por exponer una sonoridad noble con un hermoso fraseo y la profundidad interpretativa.
Definitivamente el conjunto merece un reconocimiento especial por haber realizado un trabajo de preparar una versión de la obra tan compleja. La ejecución del cuarteto de la Orquesta Sinfónica de Torrevieja debe considerarse cómo una manifestación de las grandes ambiciones y valentía. Después de todo S.Tkach, P. Vasilevsky. L. Cámara y Z. Kalatozishvili son excelentes músicos y para ellos garantizar una muy positiva impresión de la ejecución es simplemente una normalidad.