Antoni Jakubowski – Crítico musical
La audiencia sedienta de buena música clásica fue impresionada durante el concierto inaugural de la temporada 2021/22, realizado por la Orquesta Sinfónica de Torrevieja con su titular el Maestro José Francisco Sánchez sobre el podio de dirigente. Los aficionados pudieron disfrutar su buen hacer con tres hits clásicos, sumamente conocidos y populares.
El Divertimento en Fa – mayor K. 138 de W.A. Mozart (1756 -1791) para la orquesta de cuerdas dio inicio a esta velada clásica. Durante la ejecución de la obra, los intérpretes exploraron toda la esencia de la partitura, recalcando y sacando a la luz la genialidad de Mozart. El maestro Sánchez nos ofreció una versión fresca, amena y alegre, prestando la atención en los acentos, e incluso, burlescos cambios dinámicos. Escuchando el Divertimento mozartiano, no es difícil darse cuenta de cómo ha evolucionado la música popular durante los últimos siglos.
Un verdadero deleite fue la ejecución del cellista invitado FRANCESCO MARIOZZI, quien durante la interpretación del famoso Concierto para Cello no 1 en Do – Mayor de J.Haydn (1732 -1809), a parte de la precisión en realización del texto musical exhibió el preciosismo de la línea melódica, con el dinamismo bien graduado y una extraordinaria integración con el discurso orquestal. Ante el público torrevejense, el cellista mostró excelente preparación técnica, sutileza e intimidad con un abanico de colores sonoros y expresiones plásticas. Su versión fue técnicamente muy segura, incluso en los pasajes más complejos, sin perder de vista los momentos de calma y lirismo, donde Mariozzi presentó mucha emotividad interpretativa. Al éxito de esta versión contribuyó, sin duda, el excelente acompañamiento de la OST bajo la batuta del maestro Sánchez, eficaz en los tuttis orquestales y, por supuesto, en la colaboración con el solista. Cómo bis Marinozzi con acompañamiento de la orquesta ofreció dos piezas de Morricone: “Gabriel ‘s”, compartiendo el solo de oboe con Francisco Valero, cómo también conmovedor tema de “Cinema Paradiso». ¡¡¡Preciosa ejecución!!!
(Una pequeña digresión; ¿Por qué en los numerosos carteles y anuncios del concierto, no se publicó el nombre del solista y tampoco la primera obra del programa el “Divertimento” de Mozart?)
La penúltima sinfonía, apodada “Gran Sol Menor”, sin duda la más popular de las 41 sinfonías mozartianas, ocupó la segunda parte de la velada. A través de la versión persuasivamente fresca, el maestro Sánchez y la orquesta consiguieron mostrar las diversas facetas de esta obra tan preciosa. Cada uno de los cuatro movimientos fue expresado en forma convincente con unas cuerdas lucientes y vientos bien integrados. Sánchez había graduado perfectamente las emociones y las intensidades de la obra, alcanzando extraer lo máximo de la empatía con los músicos de la Orquesta. Al mostrar toda clase de colores sonoros que ofrece la Sinfonía, logró realmente una altísima calidad interpretativa, enfatizando a la vez la grandeza y la nota trágica de la obra, provocada por Mozart intencionalmente en la implementación de la tonalidad Sol Menor, dotada solamente en dos de sus Sinfonías – No 25 y 40.
Cómo broche de oro, la Sinfónica torrevejense bajo J.F. Sánchez regaló para los presentes la famosa “Aria de la Suite en Re-mayor” de J.S. Bach, en la que brillaron todas las cualidades interpretativas de nuestra Orquesta.
En fin, el inicio de la temporada memorable, magníficamente realizado, que nos dio la posibilidad de escuchar la belleza musical de los Clásicos vieneses con soberbias interpretaciones, aunque… definitivamente es preferible disfrutar de nuestra Sinfónica, escuchando sus actuaciones en vivo.