Torrevieja mostró sus condolencias por la muerte de la Reina Isabel II

Se realizó un minuto de silencio y se izó la bandera del Reino Unido a media asta.

Torrevieja mostró sus condolencias con motivo del fallecimiento de la Reina Isabel II con un acto institucional el pasado 9 de septiembre en la Plaza de la Constitución, donde se guardó un minuto de silencio y se izó a media asta la bandera del Reino Unido, que se mantuvo durante tres días en el mástil. El acto contó con la presencia del alcalde, Eduardo Dolón, y gran parte de la corporación municipal, además de miembros de asociaciones de residentes británicos. Posteriormente, se procedió a la firma en el libro de condolencias ubicado en la entrada del Ayuntamiento, en el que los ciudadanos pueden dar su pésame a la familia real británica.

El alcalde mostró sus condolencias en nombre de todo el pueblo de Torrevieja a los más de 5.000 residentes británicos censados y que son auténticos torrevejenses. Eduardo Dolón alabó la figura de Isabel II, indicando que “ha sido un ejemplo como reina y un referente para los ciudadanos del Reino Unido y también para el resto del mundo, habiendo representado perfectamente al pueblo británico durante los últimos 70 años”.

El 21 de septiembre, misa funeral

Por otro lado, el miércoles, 21 de septiembre, tendrá lugar una misa funeral en la Parroquia de la Inmaculada para conmemorar la vida de la Reina Isabel II de la mano de la Asociación Royal British Legion de Torrevieja con la colaboración del Ayuntamiento. Las puertas se abrirán a las 10:30 horas y el servicio comenzará justo antes de las 11:00 horas. Además, el libro de condolencias se situará en la entrada de la iglesia para que los asistentes y ciudadanos en general puedan rendirle homenaje.

Asimismo, hoy sábado, 17 de septiembre, a las 11:30 horas, está prevista una liturgia en inglés de la comunidad británica en la Iglesia de la urbanización de La Siesta.

Graham Knight, británico residente en Torrevieja: “La Reina Isabel II era muy querida y su muerte ha sido un momento muy triste. Ella dijo que iba a dedicar su vida al servicio de su gente y eso ha hecho durante 70 años, incluso hasta dos días antes de su muerte. Hemos visto como ha cumplido con su promesa y su deber”. En cuanto a los actos organizados por el Ayuntamiento, señala que “fue un detalle adecuado y muy apreciado por todos los residentes británicos en la ciudad”.