El pasado jueves tuvo lugar el pleno de carácter ordinario correspondiente al mes de enero. El orden del día solamente recogió cuatro puntos y dos de los asuntos previstos tuvieron que ser retirados debido al informe de la secretaria que anuló los dictámenes de las comisiones tras advertir la oposición que el alcalde no había delegado sus funciones vía decreto a su segunda teniente de alcalde, Sandra Sánchez, antes de ausentarse de las citadas comisiones por estar desplazado en Fitur. De esta forma la sesión se limitó a la dación de cuentas de los decretos de alcaldía, resoluciones de los órganos unipersonales y de los acuerdos de la Junta de Gobierno Local, todo ello durante el pasado mes de diciembre. Entre todos los acuerdos que fueron trasladados por la concejal portavoz del gobierno del Partido Popular, Rosario Martínez, sobresalió el referido a la puesta en valor del patrimonio arquitectónico de las salinas de Torrevieja y La Mata, cuyo texto definitivo fue aprobado en el mes de diciembre a través de un decreto. También se dio cuenta la aprobación del proyecto de obras de terminación del pabellón blanco de la Ciudad Deportiva, y la adquisición de bienes inmuebles como el bien colindante a la fábrica del hielo y el edificio de La Plasa. Igualmente se reflejó y se dio cuenta de la prórroga del presupuesto de 2022 para 2023. Precisamente este asunto del funcionamiento económico del Ayuntamiento fue profusamente cuestionado por los representantes de algunos de los grupos de la oposición.
La sesión plenaria sí contó con la habitual batería de preguntas formulada por varios de los concejales de los grupos de la oposición.