El investigador torrevejense Guillermo Martínez ofreció la segunda de las conferencias de las VI Jornadas ‘Lagunas de Torrevieja y La Mata: paisaje cultural, historia y patrimonio’, evento organizado por la asociación cultural Ars Creatio. El acto, presentado por la coordinadora de las jornadas Ana Meléndez, contó con la presencia de los concejales José Antonio Quesada y Concha Sala.
La charla, que tuvo lugar en el salón principal del Casino, llevó por título ‘La laguna salada de Torrevieja como gran revolución en biotecnología’. El ponente aportó detalles técnicos sobre la adaptación de los microorganismos a la alta concentración salina y la radiación solar. En este sentido, señaló que uno de los medios que les permiten la supervivencia es la pigmentación, lo que proporciona a la laguna de Torrevieja su típico color rosado, trasladado después a los flamencos por vía alimentaria.
También explicó cómo se trabaja en su laboratorio para conseguir las condiciones que permiten la obtención de bioplásticos y pigmentos, y su uso en biorremediación o en tratamiento de enfermedades.
Como conclusión, el científico torrevejense aseguró que en las lagunas tenemos un tesoro de enorme potencial biotecnológico y biomédico. Respondiendo a las preguntas del público, insistió en la necesidad y el interés de continuar investigando en ellas para determinar con exactitud los microorganismos que las habitan.
Al final del acto, Josefina Nieto, presidenta de Ars Creatio, entregó al ponente como recuerdo el logo salado de la asociación.