Las celebraciones en honor de la Virgen del Carmen finalizaron el pasado domingo, el día de su festividad, con la siempre esperada procesión que este año tuvo varias novedades. La primera de ellas fue la visita que realizó a la nueva Lonja del Pescado que ha sido abierta hace unos meses y que forma parte de las obras del nuevo recinto portuario que se están llevando a cabo. Allí fue embarcada en el único pesquero de arrastre que queda en activo en la flota local, el «Samuel Ruso». La virgen fue acompañada por decenas de embarcaciones en su recorrido por la dársena del puerto. A su regreso fue descubierto un azulejo en la fachada de la lonja, obra de “Larios” de Lorca, donado por Pedro Sánchez, la Empresa “Geosen” y Sergio Aracil “El pequero”. Después fue disparado un castillo de fuegos artificiales tras el canto de la salve marinera por la Masa Coral «José Hódar» y la banda de la Unión Musical Torrevejense dirigida por Carlos Ramón Pérez. Otra de las novedades fue el paso de la procesión por el paseo marítimo de Juan Aparicio entre una multitud de personas con el fin de llegar por la calle Zoa hasta la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús. Fue un peregrinaje extraordinario con motivo del año jubilar con motivo del cincuenta aniversario de la parroquia. La Virgen del Carmen ya visitó la antigua Ermita hace casi cincuenta años en una romería que organizó el entonces párroco de la Inmaculada, Ricardo Navarro, pero en esta ocasión la Virgen se introdujo en el interior del templo del barrio de La Punta donde permanecerá una semana. Antes tanto el coro como la banda volvieron a entonar la salve marinera mientras el párroco, Aurelio Ferrándiz vitoreaba a la Virgen del Carmen y a Torrevieja.
Mención especial mereció la Reina de la Sal, Maribel López Cerdán y sus damas Minerva Sinnema y Lucila Pérez, ataviadas con el tradicional traje de pescadora que prácticamente está en desuso. Esta ha sido una buena forma de reivindicarlo.
Madrugador inicio del día de la patrona
Sobre las nueve de la mañana dieron comienzo los actos del 16 de julio. La alegría de la música llegó a la tradicional barriada de pescadores en La Punta. La charanga «Dacapo» amenizó una chocolatada y después se trasladaron al puerto para poner la banda sonora a la tradicional Cucaña. El que más banderas recogió fue Joaquín Almarcha que se llevó el primer premio. El segundo fue para Javier Viuda y el tercero lo consiguió Almansa. El cuarto y quinto premio fue para Valentín Rojas.
El día anterior tuvo lugar en la lonja del pescado el Concurso de Paellas. Allí el ambiente se contagió del ritmo de la Charanga “Al Lío” de Granja de Rocamora. Los premiados fueron, los niños Enzo y Álvaro que consiguieron el primer galardón dotado con Trofeo y 120 euros. El segundo, con trofeo y 90 euros fue para José Soto que también consiguió el tercero con trofeo y 60 euros.