Cientos de personas expresaron su cariño a Manuel Martínez después de más de 23 años como párroco, a Pedro Payá que ha estado en Torrevieja 9 años y Mikel Uribe con una estancia de 2 años.
Como en las mejores ocasiones de su historia, la Iglesia de la Inmaculada Concepción se llenó totalmente con motivo de la solemne misa concelebrada de la despedida de los sacerdotes de esta parroquia que tuvo lugar en la tarde del pasado domingo 27. De modo especial el homenaje estuvo dirigido al que ha sido párroco durante veintitrés años y medio, Manuel Martínez Rocamora, a la sazón consiliario de los principales colectivos católicos de la ciudad como la Asociación Hijos de la Inmaculada o la Junta Mayor de Cofradías, entre otros. Pero también para Pedro Payá Giménez, vicario a lo largo de nueve años, donde ha compartido también la gestión de las parroquias de San Roque y Santa Ana, San Pedro y San Pablo y la Ermita de la Asunción de Los Balcones, junto con el periodo que fue capellán de las Hermanas Carmelitas. Igualmente se tributó la despedida a Mikel Uribe que, durante dos años ha formado parte de los sacerdotes del templo de La Purísima. Junto a los sacerdotes homenajeados también concelebraron el nuevo vicario episcopal de zona y párroco del Sagrado Corazón, Aurelio Ferrándiz, el nuevo arcipreste de Torrevieja y párroco de Los Montesinos, Francisco Román y el sacerdote torrevejense nacido en Polonia, Kamil Krzysztof.
EL TERCER PÁRROCO QUE MÁS TIEMPO HA PERMANECIDO EN LA HISTORIA DE LA PURÍSIMA
La solemne misa, amenizada brillantemente por el Coro Arciprestal que dirige Aníbal Cano, contó con la introducción de Antonio Aniorte Guerrero como miembro del Consejo de Pastoral de la parroquia y presidente de Hijos de la Inmaculada. Destacó los distintos rasgos que ha conformado el servicio ministerial de cada uno de los sacerdotes a lo largo de estos años, señalando que Manuel Martínez ha sido el tercer párroco que más tiempo ha permanecido en su cargo en la historia del templo de La Purísima.
Entre los numerosos participantes lo hicieron en la liturgia de la palabra el presidente de la Junta Mayor de Cofradías, Francisco Beltrán y el de la Hermandad del Santísimo, José Giménez junto a Inmaculada Munuera en representación de los ministros extraordinarios de la comunión de la parroquia.
En los diferentes ritos eucarísticos hubo representación de todos los sectores parroquiales con especial profusión de jóvenes.
Los instantes de mayor emoción se produjeron ya en la parte final cuando los sacerdotes se dirigieron al gran número de asistentes. El párroco, Manuel Martínez tuvo un recuerdo entrañable para su padre, quien le acompañó cuando llegó a Torrevieja y recordó cómo los torrevejenses le acompañaron en los difíciles momentos de su fallecimiento. Habló de «Torrevieja de mi alma, mi pueblo» donde sus gentes, dijo «me habéis hecho sentir uno más y llevo muy dentro de mí a La Purísima». Terminó comprometiéndose a venir a Torrevieja cada día de La Purísima y lanzando vivas a La Purísima y a Torrevieja.
Por su parte Pedro Payá trasladó a los asistentes su visible emoción en el instante de señalar a los muchos amigos que deja en la ciudad, así como al destacar a sus padres que le escuchaban con suma atención. Tuvo palabras de agradecimiento para el sacristán, Rafael, para el párroco Manuel Martínez, el Coro Adonai, Hijos de la Inmaculada y sobre todo al grupo de jóvenes «Grumetes» de la parroquia. También para los medios de comunicación, entidades y para el alcalde, Eduardo Dolón, que asistió a la misa y a los concejales de todos estos años.
El también reconocido Mikel Uribe dijo que había descubierto en estos años una Torrevieja que «es un crisol de razas, lenguas y culturas que conforman una catolicidad universal». Dijo que de estos años «me llevo rostros, corazones, personas y sus historias».
Otro de los instantes especiales de la ceremonia fue cuando recibieron distintos presentes por parte de toda la comunidad parroquial y de la Asociación Hijos de la Inmaculada. Destacaron las pequeñas reproducciones de la imagen de la patrona, así como las estolas que recibieron con la imagen de La Purísima y el cáliz elaborado en plata de ley de orfebrería francesa que recibió el párroco, Manuel Martínez.
EL ALCALDE ENTREGÓ UN BARCO DE SAL A CADA SACERDOTE
Posteriormente en un vino de honor popular que se celebró en la calle Maestro Vallejos, a la espalda del templo, el alcalde, Eduardo Dolón dirigió unas palabras en las que destacó la importancia de la aportación de cada uno de los sacerdotes a la ciudad y retó a Pedro Payá a continuar convocando cada año el enfrentamiento deportivo «Amigos del Cura» frente a «Amigos del Alcalde» que tanta popularidad ha conseguido en los últimos años. El primer edil entregó a cada uno de ellos un barco de sal «para que regresen a Torrevieja cada año en la celebración de La Purísima».
ESTE DOMINGO TIENE LUGAR LA ENTRADA DEL NUEVO PÁRROCO DE LA INMACULADA
Con la presencia del Obispo de la Diócesis Monseñor Munilla, tendrá lugar este domingo día 3 de septiembre a las 20:00 horas, la misa de entrada tanto del nuevo párroco, José Antonio Gea Ferrández como del nuevo vicario de la Parroquia de la Inmaculada, José Antonio Miravete Poveda. Desde el Consejo de Pastoral de la Parroquia se anima a todos los fieles a que acudan a esta misa que inicia el nuevo periodo del templo de la patrona de la ciudad.