El alcalde Torrevieja, José Manuel Dolón, compareció en rueda de prensa para dar cuenta de la situación en la que se encuentra el proyecto de remodelación del paseo de Punta Margalla entre la playa de El Cura y la Curva del Palangre. El primer edil calificó de “indecencia” el hecho de que el exalcalde de la ciudad y diputado Provincial por el PP, Eduardo Dolón, achaque al Ayuntamiento de Torrevieja que la obra no esté ejecutada “cuando el Ayuntamiento no tiene nada que ver y cuenta con la partida económica necesaria para este proyecto”. A lo que añadió que “el único problema que tiene el Ayuntamiento con el paseo de Punta Margalla es que no está hecho”.
De hecho, la licitación de la obra, su adjudicación, la firma del contrato, así como la supervisión de la ejecución de las mismas dependen íntegramente de Diputación. “Si no se han iniciado las obras –dijo el alcalde- es porque no se ha firmado el contrato entre la empresa adjudicataria y el organismo provincial”. En la última reunión que mantuvo el Ayuntamiento con los técnicos de Diputación “se fijó como día para la firma del acta de replanteo de las obras enero de 2018 y su finalización se fijó antes de inicio de Semana Santa. Desde ese momento no se ha vuelto a saber nada del motivo por el que no se ha procedido a la ejecución de las obras”.
En su comparecencia ante los medios de comunicación, el primer edil recordó que en agosto de 2012 el anterior equipo de Gobierno presentó ante los medios de comunicación esta obra y anunció que se había encargado la redacción del proyecto, proyecto que se redactó y presentó en el año 2013.
José Manuel Dolón mostró el documento en el que se reflejan cronológicamente todos los pasos que administrativamente han ido sucediéndose en el expediente, en los que destacó un parón que se inicia en julio de 2014 y se prolonga durante todo el año 2015. La actividad se retoma en febrero de 2016 cuando el actual equipo de Gobierno se interesa por el proyecto y recibe de la Diputación el acta de comprobación de replanteo de las obras. Otro dato relevante del que informó es que hasta marzo de 2016 no se recibió la autorización de la Conselleria en el Ayuntamiento para realizar las obras.
Valoración económica
Además de los aspectos administrativos y de procedimiento de este proyecto, el alcalde puso sobre la mesa las modificaciones que se han tenido que realizar para que la empresa adjudicataria asumiera la ejecución del mismo. Salió a licitación por 1.111.904 euros y se adjudicó por 823.000 euros, una cuantía por la que posteriormente la empresa parece ser que “no estaba dispuesta a ejecutar el proyecto. Y todo el problema es que hasta final de 2017 no se produce una adecuación del proyecto al dinero por el que la empresa estaba dispuesta a asumirlo. Esa es toda la realidad”.
Por ese motivo, Dolón afirmó que luego hubo que hacer adecuación de partidas, como se refleja en la documentación que hizo pública, “con la intención de ajustar el coste dentro del límite económico autorizado. El proyecto modificado ha reducido las actuaciones superfluas y menos necesarias. Para ello se ha mantenido el ámbito principal de actuación, pero se han desestimado aquellas actuaciones que no contaban con una especial relevancia, aun habiendo sido sugeridas por el Ayuntamiento”, leyó.
Para ello, “se procedió a reestudiar todo el proyecto inicial para suplir algunas carencias detectadas, priorizar actuaciones contempladas y precisar la definición de algunas partidas de obra que eran objeto de mala interpretación”, indica el mismo documento. Como consecuencia, el coste de la obra se incrementó en 80.516 euros, cuantía que asumió al 50 por ciento la Diputación y el Ayuntamiento (40.258, 98 euros cada entidad pública).
Dolón incidió en que lo único que ha hecho el Ayuntamiento en todo este procedimiento, además de encargar el proyecto de redacción a Plania, fue dotar esta obra con partida económica para cumplir con su parte. Por eso dijo que no entiende el motivo por el que se está culpando al Ayuntamiento “ni por qué la Diputación no ha resuelto el contrato. No entendemos por qué en vez de dar ese paso ha estado un año con la indecencia y la poca vergüenza de decir que el responsable es el Ayuntamiento de Torrevieja”. A lo que añadió su sospecha de que también haya motivos políticos para que se haya paralizado la obra “lo que hablaría de su catadura moral” ante la posibilidad de que no se ejecute la obra hasta que no cambie el gobierno de la ciudad.