Manuel Martínez Rocamora, párroco de la Inmaculada hasta el pasado mes de septiembre, tomó posesión como nuevo Canónigo de la Santa Iglesia Catedral de El Salvador y Santa María de Orihuela. La ceremonia tuvo lugar en el templo catedralicio oriolano y contó con una nutrida representación de torrevejenses. La Parroquia de la Inmaculada desplazó un autobús y fueron también muchos los que acudieron en sus vehículos particulares. El solemne acto contó con una amplia representación oficial entre quienes se encontraba la edil, Concha Sala Maciá en representación del Ayuntamiento de Torrevieja. También estuvo la alcaldesa de Redován, localidad natal de Martínez Rocamora, Nely Ruiz y varios de sus concejales, así como una delegación del Ayuntamiento de Orihuela y de la pedanía de Desamparados, donde el nuevo canónigo está al frente de su iglesia parroquial.
El oficio, amenizado por el Coro de la Catedral, dirigido por Pilar Fabregat, estuvo revestido de gran solemnidad. Tras la toma de posesión se produjo la presentación del nuevo canónigo, a cargo del Deán de la Catedral de Orihuela, José Antonio Gea Ferrández, a la sazón actual párroco de la Inmaculada de Torrevieja. Después, el cabildo catedralicio se desplazó al completo hasta el coro del templo, donde Manuel Martínez recibió los atributos como nuevo miembro del órgano rectos del templo, donde también se encuentran el expárroco de la Inmaculada, José Antonio Moya, el expárroco del Sagrado Corazón de Jesús de Torrevieja, Ginés Ortíz, así como el actual párroco del Sagrado Corazón y vicario episcopal, Aurelio Ferrándiz.
Manuel Martínez Rocamora pronunció unas palabras de agradecimiento tanto al Obispo de la Diócesis, José Ignacio Munilla como a todos los sacerdotes y también a las autoridades presentes. Con gran emoción recordó a sus padres, José y Pilar y también mencionó a su familia, incluida la que está en la distancia. También tuvo palabras para las muchas personas que acudieron, muchas de las cuales forman parte de las comunidades parroquiales en los que ha ejercido su ministerio sacerdotal durante 46 años.
Tras la ceremonia se formó una gran fila de personas que quisieron saludar al nuevo canónigo de la Catedral de Orihuela.