‘La Cenicienta de Nueva York’, en Torrevieja
La modelo y diseñadora de zapatos italiana Pamela Quinzi, conocida como ‘La Cenicienta de Nueva York’, está pasando el confinamiento en Torrevieja. ‘Robada Primavera 2020’ es la nueva colección de su marca Kilame, que ha creado durante su encierro. En Vista Alegre hemos conocido su historia a través de una publicación en su blog, donde narra qué le ha traído hasta aquí y cómo está llevando la situación a tantos kilómetros de su casa en Nueva York y de su familia en Roma.
“La vida es impredecible y nunca deja de sorprenderme”, asegura la joven modelo y diseñadora, que ha vivido los últimos diez años en Estados Unidos. Y es que en junio de 2019 su vida dio un giro inesperado después de unas vacaciones en Ibiza, especialmente su vida amorosa. En octubre de 2019 llegó por primera vez a Torrevieja con su novio Iván, aunque en silla de ruedas, ya que en la isla ibicenca se cayó y se rompió una pierna. “Sí, lo peor que le puede pasar a una diseñadora de zapatos”, asegura.
En Torrevieja realizó rehabilitación y fisioterapia para recuperarse, un proceso largo en el que contó con el apoyo de su pareja, que le mostró los rincones de la ciudad para animarla. “Estaba viviendo el momento más difícil de mi vida, pero disfrutaba descubriendo este nuevo lugar”, confiesa. Pamela empezó a caminar con una muleta a finales de noviembre y poco a poco se fue recuperando.
Durante su estancia en Torrevieja visitó la playa y las salinas, sorprendida del agradable clima de diciembre, y participó en las paellas de las fiestas patronales con su novio y un grupo de amigos, además de disfrutar del Belén Municipal. “Disfruté de mi tiempo en Torrevieja, aprendí mucho de la cultura española”, señala.
Precisamente, su tiempo de descanso en Torrevieja, viviendo junto al mar, le llenó de inspiración para crear nuevas piezas. En Navidad viajó con Iván a Italia y después a Nueva York hasta finales de febrero. Pocos días después de llegar a Torrevieja, el mundo cambió por la pandemia del COVID-19. “Aquí estamos ahora, encerrados en casa, en Torrevieja”, afirma. Pamela dice que tiene suerte de ver el mar desde su casa, y no ha parado de estar en contacto con su familia. Durante el confinamiento trabaja con el ordenador, crea piezas y hace sesiones de fotos ‘caseras’. Como todos, espera que todo esto termine, con suerte, pronto.