El 65% de los usuarios de Adiem ha mejorado su autonomía personal y calidad de vida durante el último año

El pasado 31 de julio, Adiem Sentit Fundación celebró en el Centro CRIS de Torrevieja, su primer Consejo de Participación en el que personas usuarias, familias y profesionales de la Fundación y del Centro Especial de Empleo INICIA ratificaron por unanimidad la memoria económica y de actividades de 2019, así como las cuentas del pasado ejercicio y el Plan de Actuación y el presupuesto de 2020, haciendo de esta forma un balance de la gestión del pasado año, de los proyectos presentes y de las líneas estratégicas futuras.

El Consejo aprobó trasladar seis propuestas de mejora al Patronato y a las Administraciones Públicas:

  1. Priorizar el desarrollo de vínculos y actividades terapéuticas en la comunidad apoyadas en el uso de instalaciones municipales como gimnasios, piscinas, pistas polideportivas y centros culturales o sociales.
  2. El mantenimiento de servicios como el de Rehabilitación y Apoyo Personal para mejorar la adherencia al tratamiento en el domicilio y prevenir su institucionalización.
  3. Inversiones destinadas a la reforma y ampliación de instalaciones, a la dotación de mobiliario de oficina e informático y a la adquisición de vehículos adaptados.
  4. Seguir luchando por garantizar los derechos de las personas con problemas de salud mental, de sus familias y de las entidades que les representan, reforzando la red de trabajo colaborativo con las Administraciones Públicas.
  5. La mejora de la accesibilidad, la seguridad y la frecuencia del transporte público hasta los Centros de Atención.

Impulsar y reconocer al voluntariado que apoye a personas con mayores necesidades de atención en su entorno.
Durante 2019 se han atendido a 385 personas (un 12% más que en 2018). Destaca la alta participación de las familias en el proceso de rehabilitación, así como la reducción de hospitalizaciones psiquiátricas en un 50%. El 65% de los usuarios ha mejorado su autonomía personal y calidad de vida, disminuyendo su nivel de dependencia y necesidad de apoyos. Han sido 66 las altas terapéuticas. El 92% reconoce haber mejorado la identificación de síntomas y la actuación en situaciones de crisis. Gracias al aumento de plazas hasta las 455 actuales, el 79% de personas valoradas por primera vez por el equipo multidisciplinar de la Fundación ha accedido de forma directa a los servicios.
La satisfacción de los usuarios y de sus familias ha mejorado, así como la participación de los grupos de interés en la mejora. Se han aumentado hasta 72 los voluntarios y hasta 152 las alianzas con entidades públicas y privadas.
Por otro lado, se han alcanzado las 60 plazas en el Servicio de Ayuda a Domicilio de Dependencia y se han concertado 70 nuevas plazas con la apertura de un Centro de Rehabilitación e Integración Social. Como nuevos proyectos destaca: el Servicio de Asistente Personal, el Centro de Día y otro Centro de Rehabilitación e Integración Social, que sumarían 90 plazas concertadas a las actuales.
Durante este último año se han aumentado en un 22% los ingresos totales y en un 3% los fondos privados, disminuyendo el endeudamiento y aumentando la solvencia de la entidad. El presupuesto para este año se incrementa un 6%, hasta los 2.200.000 €, aprobándose inversiones por valor de 250.000 € para la reforma y adecuación de los centros.  El Centro Especial de Empleo “INICIA” ha contado en 2019 con una plantilla de 12 personas con discapacidad en los servicios de limpieza y conserjería, con un aumento del 24% de ingresos (101.000 € en total), gracias al mayor número de clientes y a la actividad de limpieza de vehículos. El presupuesto de ingresos en este sentido se incrementa un 69%, hasta los 170.000 €, gracias a la puesta en marcha de nuevas actividades de restauración que permitirán la creación de cuatro nuevos puestos de trabajo para personas con discapacidad.
Con todo ello, el Plan Estratégico 2016-2019 ha cumplido el 83% de objetivos y el 85% de líneas estratégicas. El nuevo Plan Estratégico 2020-2023 acaba de ponerse en marcha con grandes retos para innovar en la mejora de la salud mental de la población en general y de las personas más vulnerables por enfermedad mental severa que, pese a los efectos de la pandemia y el empobrecimiento económico que dificulta todavía más su inclusión social, siguen siendo un ejemplo de superación y resiliencia frente a las adversidades.