El actor Juan Echanove volvió por tierras torrevejenses esta vez protagonizando la obra del premio Nobel, Mario Vargas Llosa, “La fiesta del Chivo” adaptada por Natalio Grueso. El lugar escogido fue el Teatro Municipal que volvió a vivir una de esas noches mágicas para los amantes de la cultura y el teatro. La obra no retrotrae a algunos momentos significativos de la vida y obra del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo, dando en todo momento una sensación de veracidad estética por su prestancia escénica, sobre todo porque al frente de ella está un actor tan extraordinario como Juan Echanove, quien encandiló al público con la sutileza y aparente naturalidad de sus gestos y registros, demostrando tener unas tablas, que le dan la valía de ser un actor en mayúscula. Destacan el papel de Lucía Quintana, delicada y con fuerza. Inocente y corrompida. La fuerza de Manuel Morón, la socorronería de Eduardo Velasco, el poder en el escenario se Manuel Alfonso, la forma de actuar de Gabriel Garbisu o la figura de David Pinilla. En definitiva, unos actores que realzan aun mucho más la obra y que hizo que el público disfrutará de ella y que al final no se cansase de aplaudir.