Antoni Jakubowski – Crítico musical
Los conciertos del Orfeón de Torrevieja ya se han convertido en una buena tradición. A pesar de las muchas dificultades de carácter objetivo, los coralistas son capaces de movilizar sus fuerzas para compartir con los aficionados del canto coral, una dosis de optimismo musical. El Orfeón volvió al Teatro Municipal para ofrecer su carismático concierto al mando del director titular Mario Ignacio Bustillo Martínez, esta vez celebrando la temporada más bella del año. Por supuesto la llegada de la primavera fue el tema y motivo del encuentro, durante el cual, gran la audiencia reunida en el teatro, pudo apreciar las propuestas corales, para pasar realmente una velada muy agradable y de muy buen nivel artístico. Y había mucho para admirar, ya que el Orfeón supo vestir las piezas ejecutadas de todos los colores y matices.
“El mes de mayo llegó”,” Son de la loma”, cómo también los coros de las zarzuelas, fueron las piezas que provocaron la frescura primaveral, al crear y mantener una atmósfera de alegría, vitalidad y elevación. Los cantantes hicieron una labor realmente encomiable. Aunque cantaron con las mascarillas puestas, (ojalá por última vez), la calidad no restó a sus acostumbradas intervenciones. A través del “Popurrí Latinoamericano” y unas conocidas habaneras, los coralistas pusieron en evidencia su cuidado sonoro, admirable disciplina artística, precisión e intimidad.
Cómo siempre, había la posibilidad de escuchar las presentaciones individuales de los solistas del coro, los que destacaron por su equilibrio y armonía, cada una expresándose con autoridad y un afinado sentido melódico. Naturalmente hay que señalar a la soprano María Jesús García, la que interpretó con soltura, presencia y mucho aplomo las famosas arias de G. Puccini, V. Bellini, U. Giordano y la canción “De España vengo”. Me llamó la atención la bella voz del tenor Artur Mullet en la interpretación de “Una furtiva lagrima”, “Halleluyah” y “I can’t stop the feeling”. Francisco A. Lafuente estuvo excelente en la canción “Usted”. Sus cualidades interpretativas mostraron también: mezzo-soprano Toñi Sánchez en la canción “Alfonsina y el mar”, Diedler Vanden en “It ‘s a beautiful day” y Francisco Augusto en “Mediterraneo”.
Para la velada, tanto el “Orfeón” cómo los cantantes solistas, dirigidos con los extremadamente sugestivos movimientos de los brazos del maestro Mario Bustillo, fueron bien preparados, cantando con buena calidad de líneas melódicas, un diverso empaste sonoro, balances y muchos momentos realmente espléndidos. Personalmente, quedé impresionado y ni siquiera me molestó el hecho de que el coro y solistas cantaran con el acompañamiento de la música instrumental previamente grabada.
En conclusión, aparte de haber pasado unos ratos muy agradables y simpáticos, el público pudo estar muy complacido de ver y oír un compromiso y dedicación total de los cantantes y del maestro Mario Bustillo en una excelente realización musical y visual, que ha sido un verdadero soplo de la frescura primaveral.! Bravissimo!.