Los niños saharauis del programa ‘Vacaciones en paz’ que pasan este verano en la ciudad y otros municipios de la comarca, fueron recibidos por el alcalde de Torrevieja, José Manuel Dolón, esta semana.
Dolón, que entregó un pequeño obsequio de material escolar a cada uno de los niños, les deseó unas felices vacaciones y agradeció el esfuerzo que hacen las familias por traerlos, al tiempo que a los pequeños les agradecía “la compensación que supone su presencia en alegría, felicidad y compañía para quienes les acogen y para los que tenemos la oportunidad de conoceros”. El primer edil animó a las familias y a la asociación que organiza esta acción a seguir “con esta labor tan solidaria y humana” y les dijo que está a su disposición “para lo que necesiten”.
Carmen Pérez, presidenta de la asociación Familias de Acogida de Niños Saharauis –FANS-, que es la encargada de traer a los niños del programa a Torrevieja, explicó a los medios de comunicación que este año la asociación ha conseguido traer a diez niños que están repartidos con familias de Torrevieja, otros municipios de la comarca, como Los Montesinos, y de la provincia, como Tibi. También hizo un llamamiento a otras familias torrevejenses “para poder traer a un número mayor de niños. Este año han sido diez y esperamos que el próximo año puedan ser más”, comentó.
El número de niños que viajan lo hacen en función de las familias que estén dispuestas a recibirlos. No se necesita ningún requisito específico, “solo tener ganas de hacerlo. Antes venían desde los 6 años, ahora como no hay suficientes familias, todos son mayores de 10 y solo pueden venir durante 3 veranos”, explicó la presidenta de FANS. Pérez recordó las difíciles condiciones en las que viven estos niños en los campamentos de refugiados “con 56 grados durante el verano, sin aire acondicionado, con escasez de agua” y unas condiciones que les obligan a estar la mayor parte del tiempo dentro de las jaimas.
La asociación que preside también participa en otros programas como “Madrasa” en el que los niños vienen a pasar el curso escolar y luego regresan a su casa en vacaciones o las recogidas periódicas de diversos productos básicos que ayudan a mejorar sus condiciones de vida. En ese sentido se refirió al envío reciente de 800 kits de pasta dentífrica a los campamentos de refugiados.
Durante los días en los que se desarrolla el programa ‘Vacaciones en Paz’, los niños, que proceden de la República Árabe Saharaui Democrática, disfrutan de jornadas de ocio y también son sometidos a distintas pruebas médicas.