El pasado 14 de julio regresó la expedición de la Delegación de Torrevieja de la Hospitalidad Diocesana de Nuestra Señora de Lourdes. Lo hacía después de los dos años de interrupción por la Covid-19 de las habituales peregrinaciones hasta la Cueva de Masabielle, en la localidad francesa de Lourdes, donde se apareció la Virgen María en 1858. Han sido unos días muy intensos y cargados de grandes vivencias en la que ha sido la 61 edición de la peregrinación con enfermos que ha convocado la Hospitalidad de la Diócesis de Orihuela- Alicante. En esta ocasión y por primera vez la hospitalidad ha estado presidida por el nuevo obispo, Monseñor José Ignacio Munilla Aguirre, quien tuvo la ocasión de compartir algunos momentos con los hospitalarios y enfermos que han viajado desde Torrevieja en autobús.
A la llegada de la expedición tuvo lugar la misa de acción de gracias por la celebración de la peregrinación de los torrevejenses. La misma fue concelebrada en la Iglesia Arciprestal de la Inmaculada Concepción por el sacerdote adscrito a este templo, Mikel Uribe y por el sacerdote procedente de China, Andrea. Durante la eucaristía se sucedieron las referencias a todo lo que rodea acudir ante las plantas de la Virgen de Lourdes, así como tampoco faltó el recuerdo al santo del día, San Camilo de Lelis. Fueron los integrantes de la hospitalidad quienes protagonizaron las diversas partes de la misa.
La Delegación de Torrevieja de la Hospitalidad de Lourdes tiene previsto realizar el próximo mes de agosto un sorteo de regalos que servirá para recaudar fondos para sus fines asistenciales, especialmente con los enfermos de cara a facilitarles su próxima peregrinación a Lourdes.