Desde pequeña a Teresa Rusa Pacheco siempre le ha gustado escribir y la enseñanza. Con 18 años se fue a Madrid a estudiar Periodismo, y ha trabajado en distintos medios como La Verdad de Murcia, El Periódico de la provincia de Alicante, la Revista Portada y el semanario Vista Alegre, además de colaborar en revistas culturales y periódicos digitales. También estuvo al frente de un conocido concurso en Televisión Torrevieja. Además, estudió magisterio de la rama de Matemáticas, su otra vocación, mientras trabajaba en Murcia. También dio clases en una academia y durante tres años –con sus hijos ya mayores- fue maestra itinerante de los circos. Los últimos diez años trabajó en colegios de San Pedro y Los Alcázares (Murcia). ‘Vaciman: Club selecto de alquiler de hombres al vacío’ es el título del primer libro de esta profesora y escritora torrevejense.
Vista Alegre: ¿Cómo surge la idea de escribir el libro?
Teresa Ruso: Hace muchos años, en el año 2000, me separé y cogí un bar en Campoamor. Entonces empiezan a desfilar hombres: los solteros, los separados, los casados… tirándome los tejos todos. Una mujer separada en aquellos momentos llamaba la atención; yo solo tenía 39 años. Entonces yo estaba un poco cansada detrás de la barra aguantando el palizón de uno detrás del otro, por un café o un vino… Para desahogarme -siempre me he desahogado escribiendo- empecé a escribir este libro en clave de humor. El humor es como una tónica en mi vida; lo que me saca de situaciones problemáticas es tomarme las cosas con humor.
V.A.- ¿A qué se debe el título?
T.R.- ‘Vaciman’ es una empresa que montan dos amigas en Torrevieja dedicada a envasar a hombres al vacío sometiéndolos a hipnosis para alquilarlos por días o fines de semana, con una clara finalidad sexual.
V.A.- ¿Cuál es el argumento?
T.R.- Las dos amigas llaman a hombres a un casting en el polígono industrial de Torrevieja, donde llegan pensando que van a un casting de una película erótica, pero allí los hipnotizan, los envasan al vacío por categorías –según los gustos sexuales- y se los llevan a Madrid, donde montan una empresa de alquiler de hombres. Las clientas no saben que están envasados, ellas ven un ‘book’ y eligen al tío. Entonces los despiertan -se les da un caldico con pelotas, una paloma y una yema de huevo con vino- y se los entregan a las clientas para el tiempo que quieran alquilarlos. ‘Vaciman’ es una novela surrealista escrita en clave de humor con algunas escenas serias y reales, también eróticas. Es ficción con algunas notas de autobiografía.
V.A.- Podemos decir que es un libro muy torrevejense…
T.R.- Sí, se desarrolla en Torrevieja, las protagonistas son de allí, aunque una de ellas vive en Madrid donde tiene una empresa de envasado de carnes al vacío, pero es de San Miguel de Salinas y su abuela de Torrevieja. Tiene algunas palabricas del pueblo, que aunque no seas de aquí se entienden por el contexto. Yo hablo como escribo o escribo como hablo, de toda la vida.
V.A.- Iniciaste esta novela hace mucho, ¿por qué publicarla ahora?
T.R.- La novela tiene como dos trozos: una parte está escrita en aquella época y después a lo largo de mi vida le he ido añadiendo capítulos y cambiando cosas, pero siempre sobre la misma temática: hombres envasados al vacío. El problema que tenía con el libro es que no encontraba el final y lo tenía parado, pero mi hija Teresa se empeñó en que lo terminara porque había leído algún capítulo y le gustó. Así que lo empecé a terminar el verano pasado que me rompí la pierna y estaba tranquila en mi silla de ruedas. Pero la clave del final la vi este año.
V.A.- ¿Qué nos puedes contar de la original portada?
T.R.- La portada es de Jorge González Gallud, un artista de Torrevieja que es pintor y diseñador gráfico, de los mejores que hay ahora mismo. Es un chico muy humilde, hijo de Molinero, el médico, y familiar de Ramón Gallud. Solamente por ver la portada merece la pena comprar el libro. Se la encargué, le expliqué de qué iba la novela y le gustó mucho la idea. Aparece la nave del polígono, con grafitis, y ha hecho un efecto como si estuviera envasada en plástico la propia portada. Ha quedado muy bonito. Ha tardado un año en hacérmela, tenía mucho trabajo, pero yo le insistí. Precisamente Jorge es uno de los hombres envasados de la novela porque ha tardado mucho en hacerme el trabajo.
V.A.- ¿Cómo ha sido el proceso de edición?
T.R.- Lo he publicado por Amazon, que da la posibilidad de auto publicar libros. Lo hice mirando el tutorial y también con ayuda. A subir la portada me ayudó Javier García Martínez, que es programador informático, y a subir el texto me ayudó mi hermano porque era muy complicado encuadrarlo en los formatos que vienen y él lo había hecho antes. Compré un ejemplar y vi muchos errores. Entonces lo corregí y lo volví a mandar. Este proceso duró unos dos meses. Hay empresas que lo hacen, pero no conocía ninguna, y me dije que tenía que sacarlo como fuera.
V.A.- Y los lectores, ¿qué opinan del libro?
T.R.- Todo el mundo me dice que le está haciendo mucha gracia. Que se lo están leyendo en dos o tres días. Los que lo han comprado por Amazon también me han dejado reseñas, todas muy buenas, hasta hombres, que como no se identifican con el ‘Vaciman’ les encanta y les hace mucha gracia.
V.A.- ¿Tienes pensado hacer una presentación pública en la ciudad?
T.R.- En septiembre voy a presentarlo en el Restaurante Alma Beach Club de La Mata. También puede que lo haga en el Casino o en el Real Club Náutico Torrevieja.
V.A.- ¿Dónde se puede conseguir?
T.R.- Se puede adquirir en la papelería Baeza, conocida como “El diablillo”, que está en la calle María Parodi. También se puede comprar en Amazon.