Afianzando y mejorando conceptos

VILLAJOYOSA C. F. 0 – 2 C.D. TORREVIEJA

Parece que los acontecimientos de la jornada inicial han servido de acicate para que el Torrevieja añada, a sus ya comprobadas capacidades futbolísticas, la madurez necesaria en envites de alto calibre. El deportista no pasa con facilidad la página de una adversidad sobrevenida. Estaba muy reciente el mazazo del gol encajado contra el Horadada y, por tanto, el propósito de que no se repitiera tal situación. Pero ese mismo recuerdo podría haber actuado como desencadenante de una ansiedad inconveniente. Hubo que superar una fase final de cierta inquietud, más latente que patente, la que sigue a la de las ocasiones no transformadas para haber dejado resuelto de sobra el signo del partido mediada la segunda parte: es decir, la obligación de no complicarse, cuando el contrario apretaba a la desesperada, un marcador que, en condiciones normales, a esas alturas habría reflejado, poco más o menos, un 0-4. Con disciplina, y sin desfallecer ni un momento, se superaría la prueba.
Después de los habituales compases de adaptación, el lance clave acaeció con el espléndido pase bombeado de Máñez desde la izquierda para la fulgurante entrada en perpendicular de Omar, que sólo pudo ser frenado, cuando ya había rebasado la frontal del área, en falta por el capitán local. Desde los once metros, y con gran seguridad, el propio Omar adelantó a su equipo, que desde ese momento se dedicaría, sin mayores miramientos, a aumentar el tanteo. Aprovechando la superioridad numérica y las dimensiones del Nou Pla, los salineros desplegarían un recital con rápidos desplazamientos, precisas diagonales e incisivas entradas por las bandas. Las ocasiones iban acumulándose. En el minuto 21, Héctor dejó desde la derecha a Rulo, cuya acción, tras varios intentos, sería neutralizada por los defensores. Poco después, el mismo delantero no marraría la nueva que se le presentó, recogiendo y colocando un balón suelto en el área tras otro ataque por la derecha.
En el minuto 28, fuimos testigos de una espectacular y nada habitual jugada: dos remates consecutivos al travesaño, y ambos desviados lo justo por el portero; primero fue Revi al cabecear otro centro de Rulo desde la derecha, y luego disparó Máñez tras revolverse en la frontal del área pequeña. El Villajoyosa no sabía cómo parar las avalanchas de fútbol y ambición de un adversario que quería amarrar cuanto antes, y que además trazaba pases rasos perpendiculares para sorprender a la cobertura; le faltaba precisar el instante adecuado para evitar el fuera de juego. Sólo a balón parado lograban los de Soler disponer de alguna opción, como la de Carles (37’), rematando de cabeza un centro de golpe franco de Miqui. Respondió el Torrevieja con las últimas oleadas previas al descanso: otra magnífica diagonal larga de Revi para Máñez, con control de éste, arrancada y disparo al primer palo, que rechazó Dani; y un saque de esquina largo de Jesús Sánchez (42’) cabeceado por Guido cerca del poste.
Salieron los locales en la segunda mitad con la firme intención de aparcar su desfavorable coyuntura y lanzarse al ataque. Miqui empezaba a sacar el tiralíneas y a poner a sus compañeros en disposición ofensiva. El Torrevieja hubo de responder con serenidad con el último valladar de Juampe, que detuvo un remate raso de Iván Plaza en el área (3’). Varios envíos bombeados fueron abortados por la defensa, que también se apuntaba a la fiesta, o por el portero, muy seguro por alto. Como los vileros ya no tenían nada que perder, los torrevejenses se tomaron un tiempo para recuperar el dominio geométrico del campo y lanzar pases que permitieran completar combinaciones. Otra incursión de Rulo por la derecha (12’) contó con el apoyo de Héctor, y el disparo del delantero se estrelló en el exterior del segundo palo. Al minuto siguiente, esta vez por la izquierda, Máñez cedió a Omar, que desde la raya de fondo centró al primer palo, sin que Revi acertara a conectar de volea ante el portero. Se escapaban oportunidades muy claras, y más que vendrían. Pero no había que descuidarse atrás: al los 21, tras una acción del Jorge local y de un rebote, la pelota le cayó a los pies a Meji, que en el área disparó fuera.
Conscientes de que no había que atravesar por ningún contratiempo innecesario, redoblaron los de rojo sus esfuerzos. A los 22 minutos de este periodo, Jesús Sánchez lanzó por la izquierda a Máñez, que tras la arrancada, y con Omar esperando el pase paralelo, prefirió disparar aun con poco ángulo obligando a rechazar a Dani. En el subsiguiente córner, Juanmi añadió a su detalle de calidad en el lateral del área un servicio en paralelo a la portería, y en carrera y en boca de gol, inverosímilmente, Akapo remató por encima del travesaño. No conformes con esto, los visitantes continuarían en su empeño. A los 29, Máñez centró atrás desde la izquierda y Fran Caballero remató desviado. Tres minutos después, nada más salir jugando con autoridad desde su área, Akapo metió por la banda derecha para Fran Caballero, que cuando encaraba solo al portero dio un toque algo fuerte al balón que permitió a éste salir y evitar el peligro. Pese a haber generado no menos de media docena de ocasiones, y varias que quedaron en amago por premiosidad en el momento de mandar el pase largo, el Torrevieja no había ampliado la diferencia de dos. La contrapartida, la factura que hubo que pagar, radicó en que el último cuarto de hora no sería plácido.
Obviamente, el Villajoyosa no renunciaba a la posibilidad de obtener un gol que multiplicara sus esperanzas. Había arriesgado, había paseado por el borde del abismo, pero en ese tramo final todavía no estaba derrotado. Era el momento de quemar las naves mientras la cabeza de los torrevejenses daba vueltas sobre lo que ocurrió la semana anterior. A los 36 minutos, Antonio dejó de cabeza para Carles, que en el área, encimado por los centrales, remató desviado. Y en la penúltima jugada del partido, un lanzamiento largo de Alfonso sorprendió a la zaga rival, el propio Carles se plantó en la frontal del área y Juampe, en su salida, desvió con el brazo. El lance se saldó con tarjeta amarilla porque el árbitro estimó que la pelota no llevaba la dirección de la portería. La barrera salvó el lanzamiento de golpe franco y ya no habría más historia. Este resultado sí se supo asegurar: queda anotada la mejoría.

Categoría: Preferente Valenciana. Grupo: cuarto. Temporada: 2018-2019. Jornada: 2.
Estadio: Municipal Nou Pla (césped artificial). Fecha: domingo 9 de septiembre de 2018. Hora de comienzo: 18.32.
Villajoyosa Club de Fútbol (camiseta, calzón y medias blancos): Dani, Carles, Sergio (Esteban 72’), Iván, Alfonso, Úbeda ©, Botella (Jeffersson 34’), Iván Plaza (Jorge 58’), Meji (Antoná 72’), Miqui ©2 y Antonio. No jugó: Paco (portero). Entrenador: José Soler Moya.
Club Deportivo Torrevieja (camiseta, calzón y medias rojos): Juampe, Héctor, Jesús Sánchez, Akapo, Guido, Cabillo ©, Revi (Juanmi 60’), Naná (Jorge 83’), Omar (Fran Caballero 68’), Rulo (Matías 74’) y Máñez. No jugó: Jesús Dueñas (portero). Entrenador: Manuel Sánchez Almodóvar.
Árbitro: López Herrero (Emilio Luis), de Alicante, auxiliado por Baeza Núñez (Ignacio) y Esteban López (Mariano). Por el Villajoyosa, mostró la tarjeta amarilla a Sergio (24’) y Miqui (87’), y la roja directa a Úbeda (10’, expulsado en la jugada del penalti); por el Torrevieja, amonestó a Fran Caballero (76’), Cabillo (80’) y Juampe (89’).
Incidencias: Se guardó un minuto de silencio en memoria del padre del portero local, Daniel Lussing. Debutaron con el Torrevieja en partido oficial Javier Akapo Martínez y Naná Kwaku Obeng. Se encendieron los focos del estadio a los 19 minutos de comenzar el encuentro. El Torrevieja no ganaba un partido de liga desde el disputado el 25 de febrero, en la jornada 24 de la pasada temporada, en Benferri.
Goles: 0-1, 10’: Omar transforma, a la derecha de Dani, un penalti de que él mismo fue objeto al ser derribado en el área por Úbeda (que en esa jugada resultó expulsado). 0-2, 23’: Rulo recoge en el área un rechazo del guardameta, que cortaba un centro de Revi a Omar, y ajusta el remate con efecto interior por el palo izquierdo.