La Diana que acompaña el amanecer del 8 de diciembre lleva apuntando a una renovación desde hace años y puede decirse que de nuevo se ha consolidado con una gran participación, con personas de todas las edades. Desde las siete de la mañana, la música de Los Salerosos fue despertando a los ciudadanos a su paso por las calles. Uno de los momentos más esperados fue el paso por la sede de “Gaex”, en la calle Diego Ramírez, que una vez más ofreció a todos cuantos quisieron chocolate con mona, paparajotes y bizcochos.