Como cada 5 de enero, infinidad de personas, entre pequeños y mayores, se echaron a la calle para presenciar la llegada de los Reyes Magos de Oriente como principal atractivo de la cabalgata que discurrió por gran parte del centro de la ciudad.
La llegada de los monarcas se produjo en el puerto pesquero a bordo de una de las embarcaciones de la firma local “Marítimas Torrevieja”, ante la mirada de un amplio número de personas que se concentraron en el recinto y aplaudieron en el momento en que Melchor, Gaspar y Baltasar descendieron de la escalerilla, siendo recibidos por el alcalde de Torrevieja, José Manuel Dolón, y el concejal de Fiestas, Domingo Pérez. Tanto el alcalde como el Rey Melchor pronunciaron unas palabras dentro del acto protocolario. En ese momento, el alcalde también hizo entrega de un reconocimiento a la familia Juárez, propietaria de “Marítimas Torrevieja”, por la realización del trayecto marítimo de los Reyes de forma desinteresada cada año.
Los diferentes atractivos con que contó la cabalgata estuvieron encabezados por una fantasía habanera, brillantemente ofrecida por la Escuela Municipal de Danza que dirige Nuria Girona. Llamativas, llenas de colorido y originalidad fueron las siguientes atracciones que formaron parte del desfile, como el viaje a la luna de Julio Verne, entre otras. Todas ellas precedieron a los boatos de los reyes, que participaron en sus carrozas. La comitiva llegó hasta las puertas del templo arciprestal de la Inmaculada, donde la propia parroquia formó un portal de Belén viviente al que llegaron Melchor, Gaspar y Baltasar, quienes finalmente, y antes de iniciar su masivo reparto de regalos, se asomaron del balcón del Ayuntamiento, desde donde lanzaron una gran cantidad de caramelos al público que se concentró en la Plaza de la Constitución.