Hay días que uno no quiere levantarse de la cama porque presiente que alguna noticia que no quiere escuchar va a asomar en la mañana, y eso fue lo que ocurrió el pasado domingo 2 de febrero. Sonó el móvil y me comunicaban, entre sollozos, la triste noticia de que Manoli Carmona Melgarejo nos había dejado.
Manoli nació en plena Guerra Civil, un 18 de septiembre de 1938, y quizás aquel día el sonido de las calles de Torrevieja se encontraba matizado por el cadencioso compás de la habanera que en su corazón ya latía. Durante toda su niñez fue acunada en una “angrunsaera” que sonaba al compás del 2/4 y que olía a harina y madera quemada.
En aquellos años de la guerra y la postguerra, en las calles de Torrevieja, una de las diversiones y entretenimientos de los torrevejenses era sentarse en la calle, en las calurosas noches de verano, y cantar habaneras tomando el fresco.
Sus padres, que regentaban una sala musical donde se amasaba pan, reunían a los vecinos en su puerta y allí comenzaban a cantar habaneras acompañadas de la guitarra y el acordeón. De este sabor a brea y sal, tanto Manoli como sus tres hermanos, Antoñico, Fina, y Toñi, se fueron impregnando durante toda su niñez y juventud.
Así es que, y como no podía ser de otra manera, esta mujer tenía que ser cantante y, a ser posible, de habaneras. Y así sucedió. Durante su juventud, el querido maestro Ricardo Lafuente creó el grupo femenino “El Trío Habanera”, compuesto por Fina Torres, Manoli Carmona y España Quesada, y el propio maestro Lafuente al piano. Estas tres mujeres, que cantaban de maravilla, tuvieron tal éxito que llegaron a grabar un disco y a actuar por diversas localidades, e incluso en algún programa de radio. También fue miembro del famoso grupo torrevejense “Los cinco levantinos”, en los que además de las tres voces femeninas de “El Trío Habanera” y el maestro al piano, cantaban Francisco Andreu y Marianico Baños. Estos magníficos grupos dejaron grandes recuerdos en la música vocal de Torrevieja, canciones como “El cartero”, “Buenos días Señor Sol”, “La caja de música”, etc., que aún hoy en día, algunos de nosotros seguimos tarareando.
En el ámbito coral, fue fundadora de la Masa Coral Torrevejense Educación y Descanso con la que actuó en el I Certamen Nacional de Habaneras de Torrevieja, que actualmente se denomina Coral Francisco Vallejos, en la que cantó durante muchísimos años, y que actualmente dirige su hija Belén Puente. Otra de las agrupaciones en las que dejó su buen hacer como cantante, porque Manoli tenía una voz muy bonita y era muy afinada, tan afinada que utilizaré una de sus frases para describirlo, “le podía hacer el dúo al filo de un cuchillo”, fue el Coro Parroquial de Inmaculada Concepción, dirigido por su amiga Maribel Vallejos.
Pero Manoli también era una gran madre y esposa, hermana, tía y amiga, una buena mujer de semblante serio, pero corazón abierto y siempre dispuesta a hacer un favor a todo aquel que se lo pedía.
Manuela, allá donde estés, te imagino con los tuyos cantando “Rosita” con tu hermano a la guitarra, cocinando esas croquetas tan buenas que tú sabes hacer y rezándole a tu Purisimica.