Tras más de setenta años cantando el pasado día 14 de octubre ha fallecido Pilar Quesada Samper a la que su padre llamó España, primero «Españica» por nacer el día de la patrona de la hispanidad, la Virgen del Pilar del año 1937, en plena guerra civil. Ella, con 86 años recién cumplidos, era la mayor de las componentes de la Coral «Francisco Vallejos» y ha vivido en primera persona prácticamente toda la historia más sobresaliente de nuestras habaneras. Fue cofundadora de la Masa Coral Torrevejense de Educación y Descanso, «El Apargate», a las órdenes del maestro Vallejos y del maestro, Ricardo Lafuente que ya en esos momentos era subdirector de la citada coral. Precisamente a partir de aquellos momentos España, formó parte del quinteto «Los 5 levantinos» y del trío «Habanera» junto a Fina Torres y Manoli Carmona. En las dos formaciones fueron las canciones, boleros y habaneras de Ricardo Lafuente las que nutrían su repertorio. Fueron años de éxitos grandiosos en la comarca y también en la provincia donde el compás y la capacidad artística de los torrevejenses asombraba a todos los públicos del momento.
Cuando llegó el 25 aniversario del Certamen de Habaneras en 1979 y la coral se refundó pasando a llamarse «Francisco Vallejos» allí estuvo España con su hermana, Manoli. Se convirtió en uno de los motores de su cuerda, siempre exigente con las mejores habaneras y partituras corales, pero también ejemplo de compromiso. Los años y los retos musicales fueron pasando, viajes por todo el país y también por el extranjero, directores… y su experiencia fue acrecentándose, pero también muchas veces su sentido del humor fue la mejor acogida para las nuevas voces que fueron incorporándose a la coral. Los jóvenes congeniaron con ella a la primera, ella fue también un poco la prolongación de sus madres en ensayos y actuaciones.
España no se quiso retirar. Su amor por las habaneras y la voz que le acompañaba fueron más que suficiente para permanecer porque el coro era su segunda familia ya con sus hijos casados y con hijas. Su carácter acendradamente trabajador era una constante en su vida, también para limpiar la sede del coro desinteresadamente y para ser de las primeras en cualquier labor que surgía.
En 2022 el Patronato de Habaneras le otorgó el Escudo de Oro del Certamen de Habaneras junto a otras voces fundadoras del coro como las de Edmundo Boj y Finuca Sala. España se ha mantenido activa hasta el último ensayo. Cantó a finales de septiembre en el Encuentro Coral que tanto a marcado a todos los coralistas de la «Vallejos» y también estuvo en la misa del pasado día 2 de octubre en honor de los patrones de la Policía Local. Ha sido un adiós inesperado y sin ruido, sencillo como ella. Su vida se ha apagado como la habanera que termina con un murmullo, pero su recuerdo quedará en todos los coralistas de la historia, en el ritmo del dos por cuatro de la habanera y en sus dos familias, el coro y sus hijos, Andrés y Sergio, nueras y nietas a quienes transmitimos el más sincero pésame.
Descansa en paz España.
Francisco Reyes